Creatividades encontradas: Cuatro miradas, un diálogo común
La exposición reúne a cuatro artistas cuyas trayectorias y lenguajes plásticos convergen en una exploración de la memoria, el paisaje y la emoción. Jacques Villares, Ángeles González, Federico Eguía y Rosario Reina presentan en esta muestra un cruce de caminos donde la acuarela, la fotografía y la pintura conviven en un diálogo entre técnica y sensibilidad. Desde la delicada captura de la luz en las acuarelas urbanas de Villares hasta la poética de Eguía, pasando por la fotografía pictórica de González y la síntesis cromática de Reina, esta exhibición invita al espectador a descubrir un entramado de visiones que, aunque distintas en su origen, encuentran puntos de intersección en su manera de abordar el arte como un vehículo de expresión y reflexión.
Cada uno de estos creadores transita un universo particular. Villares, con su dominio del agua y el pigmento, transforma paisajes urbanos en escenarios etéreos y vibrantes. González, a través de su fotografía fine art, difumina los límites entre la imagen y la pintura, explorando la luz y la figura femenina con una sensibilidad única. Eguía, con su fusión de abstracción lírica y poesía visual, construye un lenguaje propio en sus obras. Rosario Reina, por su parte, presenta una evolución hacia la síntesis formal y cromática, con piezas que reflejan su proceso de introspección y la influencia de sus viajes. Creatividades encontradas no es solo una exposición de estilos y técnicas diversas, sino un encuentro de artistas que, desde sus respectivas disciplinas, proponen una mirada renovada sobre el arte como un puente entre la experiencia, la emoción y la transformación personal.
Jacques Villares, nacido en 1967 en Cormeilles-en-Parisis, Francia, es un ingeniero de caminos, canales y puertos de profesión y pintor autodidacta que ha destacado en el mundo de la acuarela contemporánea. Su pasión por la pintura se despertó observando las acuarelas de su padre, lo que lo llevó a explorar este medio desde una edad temprana. Tras un paréntesis de más de dos décadas alejado del arte, en 2013 retomó los pinceles, iniciando una prolífica etapa creativa que continúa hasta hoy.
La obra de Villares se caracteriza por una notable habilidad para capturar la esencia de paisajes urbanos y naturales, empleando una paleta de colores vibrantes y una técnica que equilibra precisión y espontaneidad. Sus acuarelas reflejan una profunda comprensión de la luz y la atmósfera, transportando al espectador a los escenarios que retrata.
A lo largo de su carrera, ha participado en numerosas exposiciones y concursos, obteniendo reconocimientos significativos. En 2014, fue finalista en el Concurso de Pintura Rápida de Móstoles con la obra "Camino de Guadalupe". Al año siguiente, recibió una Mención de Honor en el mismo certamen por "Nuestra Ermita" y obtuvo el tercer premio en el VI Premio Fundació Barcelona Olímpica con "Scrum". Además, ha sido seleccionado para eventos internacionales como la Bienal Castra en Eslovenia y la Bienal de la Sociedad Internacional de Acuarela en India.
Entre sus obras destacadas se encuentra "Madrid, Gran Vía", una acuarela que captura con maestría la vitalidad y dinamismo de una de las arterias principales de la capital española. Esta pieza ejemplifica su destreza para plasmar escenas urbanas con una perspectiva única y una ejecución técnica impecable.
La trayectoria de Jacques Villares es un testimonio de dedicación y talento, consolidándose como una figura relevante en el panorama de la acuarela contemporánea. Su capacidad para transmitir emociones a través del color y la forma continúa cautivando a audiencias tanto nacionales como internacionales.
Ángeles González desarrolla una notable trayectoria en el ámbito de la fotografía Fine Art. Con más de dos décadas de experiencia en el sector audiovisual, especialmente en televisión y en la creación y edición de contenidos, su incursión en la fotografía ha sido autodidacta, permitiéndole forjar un estilo único y reconocible.
Su obra se caracteriza por una fusión magistral de la fotografía con elementos propios de otras disciplinas artísticas, como el óleo, el pan de oro y el aluminio. Esta combinación le permite crear imágenes que trascienden la mera captura fotográfica, dotándolas de una apariencia pictórica que invita al espectador a cuestionar si se encuentra ante una fotografía o una pintura.
La figura femenina es una constante en su trabajo, donde busca mostrar diversas formas de belleza y transmitir una amplia gama de sentimientos y emociones. Su enfoque en el claroscuro y su inspiración en los maestros del Barroco y el Renacimiento se reflejan en composiciones que evocan una atmósfera atemporal y onírica.
Ángeles ha presentado sus obras en numerosas ciudades alrededor del mundo, incluyendo Nueva York, Tokio, Madrid, Londres, París, Milán, Zúrich, Dubái y Venecia, consolidándose como una referente en la fotografía Fine Art a nivel internacional.
La obra de Ángeles González es un testimonio de su creatividad y habilidad para explorar los límites entre la fotografía y la pintura, ofreciendo al espectador una experiencia visual rica en matices y significados.
Con una trayectoria artística que abarca más de 50 exposiciones individuales y más de 250 colectivas en todo el mundo, Federico Eguía ha construido un universo plástico donde la reflexión, la investigación formal y la experimentación con materiales confluyen en un discurso visual profundamente meditado. Su obra ha estado presente en ferias internacionales desde Japón hasta Estados Unidos y Europa, formando parte de colecciones privadas, instituciones, museos y fundaciones que han reconocido su capacidad para redefinir los límites de la pintura y la tridimensionalidad. Su propuesta artística se enmarca en una abstracción lírica que dialoga con una geometría poética, estableciendo un equilibrio entre la precisión técnica y una expresividad cargada de significado.
El lenguaje plástico de Eguía se caracteriza por una integración inteligente de materiales, planos cromáticos y textos que, más que narrativos, operan como elementos visuales y simbólicos, sugiriendo una comunicación susurrada, casi inaccesible, entre la obra y el espectador. En su búsqueda de nuevas posibilidades expresivas, el soporte pictórico se transforma: a veces se abre para revelar su materialidad oculta, otras veces supera la bidimensionalidad al incorporar piezas de madera superpuestas o incisiones en la superficie. Su obra, lejos de cualquier efectismo retórico, condensa pensamiento y emoción, convirtiendo cada composición en una pieza armónica, equilibrada y profundamente comunicativa. Con una precisión poética que recorre toda su producción, Federico Eguía demuestra una constante capacidad de "pensar la pintura", explorando sus límites y redefiniendo su esencia con cada nueva creación.
Rosario Reina
La obra de Rosario Reina es el reflejo de una vida marcada por el movimiento, la exploración y la introspección. Desde sus primeras experiencias artísticas en la infancia, influenciada por su padre y su participación en concursos escolares, hasta su trayectoria consolidada con exposiciones individuales y colectivas en España y el extranjero, Reina ha construido un lenguaje pictórico donde la luz y el color se convierten en vehículos de memoria y emoción. Sus pinturas, muchas de ellas con formatos similares al de una maleta, evocan su experiencia como viajera y la necesidad de capturar instantes efímeros que se transforman en composiciones sutiles y evocadoras.
Con exposiciones en espacios como el Museo Paquiro en Cádiz, la Sala Patricio Howden en Sevilla y la Galería Montsequi en Madrid, Rosario Reina ha transitado por diversas etapas creativas, desde un uso vibrante del color hasta una paleta más depurada y esencial. Su reciente exploración de tonos minimalistas – blancos, negros y acentos cromáticos estratégicos – responde a un proceso de introspección y meditación, influenciado por su vida junto al mar. Su pintura se inscribe en una búsqueda donde "menos es más", creando atmósferas que invitan a la contemplación y al misterio. A pesar de los desafíos físicos que supone su sensibilidad a ciertos materiales, Reina continúa experimentando con técnicas y texturas, reafirmando su compromiso con una expresión artística que fusiona el viaje exterior con el viaje interior.